TransFIORmers, un equipo francés de motociclismo, no solo acaba de anunciar que uno de sus principales patrocinadores será la compañía británica especializada en impresión 3D Renishaw, responsables de la primera bicicleta del mundo fabricada mediante impresión 3D y que ahora se especializarán en la fabricación de piezas de alta competición que serán incorporadas a las motocicletas del equipo.
El anuncio de esta colaboración no es casualidad ya que, desde dentro del equipo TransFIORmers, en un momento dado, surgió la idea de incorporar determinadas piezas a sus motocicletas fabricadas mediante tecnología de impresión 3D. Llegados a este punto, comentarte que no solo hablamos de elementos aerodinámicos, sino incluso de una nueva suspensión delantera completamente diferente a cualquier otra pieza de este tipo utilizada en el sector.
TransFIORmers consigue desarrollar una suspensión delantera impresa en 3D
Si estás interesado en conocer como funciona esta nueva suspensión fabricada en metal, comentarte que a día de hoy el equipo TransFIORmers compite en el FIM CEV, dentro de la categoría Moto2 realizando, en alguna ocasión a lo largo del año, varios wild cards en el mundial de Moto2.
En cuanto a la idea de esta peculiar suspensión, comentarte que la idea surgió dentro del equipo francés donde militaba el ingeniero Caude Fior allá por los años 80 dentro del Mundial de 500 cc. Una vez el brillante ingeniero murió parecía que la idea había sido completamente desechada hasta ahora, cuando Christian Boudinot, expiloto de Fior, ha decidido continuar con el trabajo de su maestro. Para eso Boudinot trabaja de forma conjunta con la compañía i3D Concept, usuarios de la impresora metálica AM250 fabricada por Renishaw, verdaderos responsables de que esta peculiar suspensión fabricada en titanio sea una realidad.
Según ha comentado Jérôme Aldeguer, ingeniero mecánico en TransFIORmers:
Para mejorar el rendimiento general de la motocicleta es necesario reducir el peso de todos los componentes situados detrás de los amortiguadores; es absolutamente vital. El fracaso para optimizar pesos de los componentes puede tener un efecto adverso en la vibración, el frenado y la aceleración, por lo que la reducción de peso es una muy alta prioridad.