Esta semana se ha presentado de manera oficial una nueva impresora 3D de la compañía Leapfrog. Esta compañía nos presentaba hace un año una impresora 3D llamada Bolt. Pues bien, un año después, Leapfrog lanza Bolt Pro, un modelo mejorado de esta impresora 3D.
Bolt Pro es una impresora 3D que intenta ofrecer resultados profesionales pero para un entorno de escritorio. Así, este modelo está totalmente cerrado durante la impresión lo que hace que cuando imprimamos materiales diferentes al plástico, la estancia no adquiera el olor a material quemado.
Además, Bolt Pro cuenta con una pantalla lcd táctil y conexión wifi que nos permitirá enviar los modelos que queremos imprimir y, a diferencia del resto, la impresora 3D se conecta con Dropbox y OneDrive para poder seleccionar, subir o enviar archivos de modelos que queramos imprimir directamente en la impresora.
Bolt Pro pesa 64 Kg., un peso considerable para una impresora 3D de escritorio, pero podemos situarlo en el suelo puesto que a la hora de imprimir el dispositivo se cierra. Las piezas impresas pueden tener los 33 cm de altura, algo que otras impresoras no pueden y la cama caliente puede alcanzar los 90º. Bolt Pro destaca por su doble extrusor. Dos extrusores que funcionan de manera síncrona lo que hace que las piezas sean más perfectas y tarden la mitad de tiempo en imprimir una pieza.
Bolt Pro no se puede comprar en tiendas como compramos una Prusa, para ello hemos de ir a la web de Leapfrog y contactar con ellos, pero la impresora no es nada barata. A diferencia de otras impresoras, la Bolt Pro tiene un coste superior a los 9.000 dólares, un precio bastante alto para un modelo de escritorio, pero puede que no tan alto para un modelo industrial. En cualquier caso, como en otros modelos, hasta que no se prueba no podemos decir si realmente vale lo que cuesta o no es así.