Desde la llegada de la impresión 3D, a pesar de que la definición y características no estaban tan avanzadas como ahora, muchas han sido las personas que se han puesto a trabajar para crear armas de fuego impresas en 3D. Algo que es bastante peligroso ya que, ni son especialistas ni estas armas tienen los certificados necesarios. Por otro lado, lo cierto es que esto hace que cualquier persona pueda tener un arma a su alcance además de, al estar fabricadas en plástico, estas puedan pasar prácticamente todos los controles.
A pesar de ser tan peligrosas, lo cierto es que de momento la Administración de Seguridad en el Transporte todavía no había confiscado una pistola impresa, al menos hasta el fin de semana pasado cuando, en el aeropuerto de Reno, Nevada, durante una inspección rutinaria a un pasajero que se mostraba un tanto nervioso, se detectó que este portaba munición real en el equipaje de mano. Una vez se pasó a inspeccionar de forma más exhaustiva tanto a la persona como a su equipaje, los agentes encontraron el arma que puedes ver en la imagen situada justo en la cabecera de esta misma entrada.
Confiscan la primera arma de fuego impresa en 3D en Estados Unidos
Como decíamos justo al comienzo de esta misma entrada, uno de los problemas de este tipo de armas radica precisamente en que, a pesar de que todos los aeropuertos del mundo cuentan con detectores de metal, un arma de fuego impresa en 3D es de plástico y resina por lo que son literalmente indetectables. A esto, también debemos añadir que normalmente estas armas se suelen poder separar en varias piezas lo que también hace que sean muy difíciles de encontrar a pesar de utilizar rayos X.