Cada día parece que no solo que la impresión 3D tenga más futuro en nuestra sociedad sino que además este tipo de tecnologías se está implantando en prácticamente todos los sectores del mercado que, a su vez, la reciben con los brazos abiertos. Una prueba de todo lo que digo lo encontramos por ejemplo en la creación de la primera base de datos de registros faciales en 3D, un trabajo que ha sido llevado a cabo por el Instituto Maxilofacial Teknon.
La creación de esta base de datos, tal y como han comentado sus diseñadores, responde a la necesidad que tenían los pacientes a la hora de realizar algún tipo de reconstrucción de mandíbula, aunque no lo parezca es la segunda operación más frecuente justo por detrás de las reconstrucción nasal. El problema de este tipo de cirugía radica en que la cara no es lineal, sino tridimensional por lo que no se pueden basar en estándares para toda la población.
Instituto Maxilofacial Teknon crea la primera base de datos de registros faciales en 3D.
Tal y como ha explicado el doctor Federico Hernández-Alfaro, director del Instituto Maxilofacial:
Tener un registro facial de cada paciente permitirá una reconstrucción personalizada y dirigida. Este proyecto nació orientado a deportistas con riesgo potencial de padecer una fractura facial, pero nos hemos dado cuenta de que realmente toda la población puede beneficiarse de este registro facial basal.
Gracias a esta iniciativa ahora cualquier persona puede disponer de un registro facial personalizado como medida preventiva ante una posible fractura facial, algo que, a pesar de que no queremos que ocurra en ningún caso, lo cierto es que es bastante frecuente por ejemplo en accidentes de tráfico, accidentes laborales, accidentes ocasionados durante la práctica de algún deporte…