La potencia de una Raspberry Pi, si la comparamos con un ordenador de hace tan sólo 15 o 20 aƱos, es simplemente fascinante. Gracias a esto no es de extraƱar que sean muchos los cientĆficos e investigadores que deciden ir mĆ”s allĆ” en este concepto y demostrar de quĆ© es capaz este procesador si unimos el trabajo de varias unidades.
Esto es precisamente el trabajo que ha realizado un grupo de investigadores del Laboratorio Nacional de Los Ćlamos, expertos en el desarrollo de nuevas tĆ©cnicas de supercomputación que, a dĆa de hoy, desarrollan software y nuevas formas evolutivas para Trinity, un supercomputador que costó a Estados Unidos 200 millones de dólares y que actualmente ocupa el puesto nĆŗmero 7 en la lista Top500 de ordenadores mĆ”s potentes del planeta.
ElĀ Laboratorio Nacional de Los Ćlamos utilizarĆ” un supercomputador compuesto por 750 Rasbperry Pi para experimentos de concurrencia y paralelismo
En el poco tiempo libre que este equipo de ingenieros tiene, el grupo ha decidido trabajar en el desarrollo de un superordenador a escala y es ahà donde han querido demostrar que es posible utilizar una infraestructura mucho mÔs modesta para evaluar el comportamiento de varios de los experimentos en concurrencia y paralelimos a pequeña escala que suelen ejecutar en Trinity. Para llevar a cabo esta tarea nada mejor que recurrir a Raspberry Pi, o mÔs bien a 750 de ellas.
DespuĆ©s de unir las 750 Raspberry Pi, para lo que han utilizado nada menos que cingo BitScope Cluster Modules, nos encontramos ante un sistema cuyo consumo de energĆa es de 1.000 W en inactividad aunque este puede dispararse hasta los 4.000 W de pico. Para poner esto un poco en contexto, comentarte que una supercomputadora, en un pico de consumo, puede llegar a consumir 25 MW. El gasto que ha conllevado crear este supercomputador ha sido de unos 100.000 dólares, a su vez, muy lejos del gasto de crear un supercomputador.