Hace unas cuantas semanas tuvimos la oportunidad de comentar sobre las intenciones que tenían en General Electric para hacerse con el control de dos de los mayores fabricantes de impresoras 3D de metal del planeta como son Arcam y SLM Solutions. Lamentablemente, en los últimos días parece que esta adquisición se está complicando más de lo previsto.
Por un lado, centrándonos en Arcam, nos enteramos con que la oferta de 685 millones de dólares que General Electric ofreció tan sólo ha tentado al 40% del accionariado de Arcam por lo que finalmente la fecha límite para aceptar la oferta se ha ampliado desde el 14 de octubre al 1 de noviembre para que los accionistas que todavía no sepan que hacer puedan tomar una decisión.
General Electric cada vez tiene más complicado adquirir SLM Solutions y Arcam.
En el caso de SLM Solutions, literalmente el problema lo tienen con un inversor que posee el 20% de las acciones, Paul Singer, que, al parecer, ha rechazado la oferta de 762 millones de dólares que General Electric puso sobre la mesa hace una semana. Aun así, para esta empresa General Electric se marcó la meta de conseguir el 75% de las acciones, el problema está en que muchos de los accionistas valoran muy positivamente las recomendaciones de Singer.
Como detalle final y para hacernos a la idea de la importancia de esta transacción, comentarte que tras el anuncio realizado por General Electric sobre la compra de estas dos compañías, el interés en las empresas dedicadas el mundo de la impresión 3D por parte de todo tipo de inversores se disparó haciendo que se incrementase el valor medio bursátil de las principales compañías que operan en bolsa, Stratasys, 3D Systems y Voxeljet, en un 8%.