Mientras a mediados del aƱo pasado en Parrot se las prometĆan muy felices gracias a que, despuĆ©s de mucho tiempo y retrasos, finalmente estaban en disposición de lanzar al mercado su nuevo dron, seis meses despuĆ©s, viven una Ć©poca demasiado negativa, tanto como para anunciar ayer mismo que iban a despedir a 290 empleados, mĆ”s o menos un tercio del total de personas que trabajan en proyectos relacionados con drones, debido a las pĆ©rdidas sufridas por la empresa durante el cuarto trimestre del aƱo pasado.
Debido precisamente a estas pĆ©rdidas generadas por el enorme fracaso durante el lanzamiento de su primer dron, la empresa anuncia que una de sus primeras intenciones de cara a 2017 serĆ” la de reorientar su oferta de productos para centrarse en todas esas Ć”reas donde sus productos son muy reconocidos y tienen mayor rentabilidad. En esta lĆnea y siempre segĆŗn Parrot, al parecer la principal razón para estos despidos la tenemos en el bajo margen de beneficios que les ofrece el mercado del dron.
Parrot anuncia que despedirÔ a 290 empleados de su división de drones.
Esta es la forma que tienen en Parrot de reconocer no solo que han llegado tarde al mercado del dron, sino que prĆ”cticamente es imposible a estas alturas lanzar un modelo y ser capaces de plantar cara a empresas del tamaƱo y calado de DJI, compaƱĆa china que domina con mano de hierro el mercado de los drones de consumo, algo que les da la opción de, en un momento dado, reducir el precio de sus modelos reduciendo los mĆ”rgenes de beneficio a precios a los que las demĆ”s empresas no pueden competir.
Esta no es la primera vez que una empresa habla abiertamente e incluso arremete contra los precios de DJI, hace no demasiado tiempo la estadounidense 3D Robotics ya culpó de los bajos precios a DJI cuando se tuvo que retirar del mercado hardware de drones para centrase en el desarrollo de software para aeronaves no tripuladas y en su navegación.