Estamos a fin de semana y, antes de despedirnos de las pocas horas que aún quedan de domingo, llega el momento de hablar de un acuerdo entre la empresa holandesa Corbion y la petrolera francesa Total en materia de fabricación y comercialización mundial de plástico PLA, mismo que a día de hoy se obtiene a partir de productos vegetales como el almidón de maíz o la caña de azúcar y que, debido a su naturaleza, se degrada de forma natural en el medio ambiente.
Este plástico se constituye de moléculas de ácido láctico en una cadena polimérica. Debido a a sus propiedades ha llegado a ser extremadamente popular en los últimos años gracias a que puede ser utilizado con grandes garantías de calidad y sobre todo a su facilidad de uso en impresoras 3D de tipo FFF (fabricación por filamento fundido) o de tipo FDM (modelado por deposición fundida) ya que, como seguro sabrás, prácticamente no sufre del temido ‘warping‘ al mismo tiempo que no necesita de una base de fabricación caliente.
Corbion y Total crearán una nueva fábrica de plástico PLA en Tailandia.
A su vez, tal y como se comenta en el comunicado de prensa lanzado por ambas compañías, uno de los principales atractivos para utilizar el plástico PLA en todo tipo de empresas que están incluyendo fabricación por impresión 3D a sus cadenas de producción, rezaba en que, gracias a su capacidad de biodegradarse, ofrecía ese plus de ‘ecoresponsabilidad‘ que tanto suele gustar, sobre todo a las multinacionales más grandes.
En cuanto al acuerdo alcanzado, destacar que tanto Corbion como Total se han comprometido a construir una nueva fábrica en las instalaciones que Corbion tiene en Tailandia con una capacidad de producción de 75.000 toneladas. Esta nueva joint venture estará participada al 50% por cada empresa y tendrá su sede central ubicada en Holanda. Como detalle final, destacar que se espera que las operaciones comiencen a principios de 2017.